No se trata sólo un lifting. La industria relojera suiza se reestructura para enfrentar el cambiante mercado del lujo. Richemont eliminó la posición de CEO global hace un año. Swatch Group es lo más parecido a una empresa familiar pero de dimensión mundial y exitosa cotización en bolsa. Rolex sigue avanzando con su consejo de administración. Modos de gestión diferentes para un mismo objetivo. Superar cada año los resultados financieros. Nuevos CEOs saltan a la palestra. Perfiles con mayor juventud de formación envidiable y experiencia sólida. El tiempo también pasa en esta industria. Renovarse y vivir. El baile de las sillas, un juego de tronos.
Jérôme Lambert, con 21 años de carrera en Richemont, ha sido designado nuevo COO. Tras el propio “chairman” Johann Rupert, es el perfil más poderoso en el grupo. Una pirámide de cambios significativos. Philippe Leopold-Metzger se retira después de 18 años como director de Piaget, y Chabi Nouri tomó su lugar. Nacida en Suiza, Nouri abre camino para futuras directoras dentro de una industria básicamente dirigida por hombres. Anterior directora general internacional de ventas y marketing, Nouri se unió al grupo Richemont en 1998 como gerente de marca de Cartier. La maison parisina parece convertirse en denominador común y escuela de futuros altos directivos.
El español Juan-Carlos Torres asumía este año el puesto de presidente (no-ejecutivo) en Richemont, donde ha ocupado varias posiciones desde 1981. El gran directivo dejaba la dirección de Vacheron Constantin a Louis Ferla. De origen francés, Ferla llega a Richemont en el 2001, como gerente de ventas para Dunhill en Hong Kong. Un perfil en ascenso que ha ido subiendo en el escalafón corporativo trabajando en Cartier en Taiwán, Medio Oriente y China antes de llegar a Vacheron Constantin el pasado 2015. De la centenaria maison de Ginebra de la Cruz de Malta saldría Geoffroy Lefebvre como director de operaciones a ser elegido (Deputy) CEO de Jaeger-LeCoultre en lugar de Daniel Riedo. Otro coronel muy respetado de la vieja guardia, en retirada.
A IWC Schaffhausen se asomó un nuevo rostro varonil y joven. Christoph J. Grainger-Herr relevaba a Georges Kern, una gestión muy personal que llevó a la marca a su mejor posicionamiento. Con un currículo singular, Christoph es un diseñador de sobresaliente formación que sólo trabajó dos años en su sector hasta que en el 2006 saltó al departamento de marketing de IWC Schaffhausen. Uno de los cambios más inesperados este año, Georges Kern tomó vuelo y ya ejerce como capitán de Breitling. Con veinte años de experiencia dentro del grupo Swatch, en específico con Omega, Raynald Aeschlimann tomó las riendas como presidente de la marca en junio del 2016, al retirarse Stephen Urquhart. Aeschlimann graduado de la universidad de St. Gallen con un MBA, se unió a Omega en 1996 como gerente de proyectos y ventas de mercadotecnia, también fue gerente de marca de Omega y Blancpain España en el 2000.
Esta renovación sigue la racha que en el 2014 comenzó Rolex cuando anunció como nuevo CEO a Jean-Frédéric Dufour. De Zenith a Rolex, Dufour es originario de Ginebra y conoce los entresijos de la industria de lujo desde muy joven, trabajando para los principales conglomerados de la industria relojera: Chopard, Swatch Group, Ulysse Nardin. Por el contrario, en Zenith fue nombrado CEO en mayo de este año Julien Tornare, después de haber trabajado para Vacheron Constantin más de 17 años. Graduado de la Universidad de Ginebra en 1996 con un grado de economía y posteriormente con una maestría en negocios internacionales de London Metropolitan University, comenzó a trabajar en Raymond Weil como gerente de ventas. Julien Tornare le reporta directamente a Jean-Claude Biver, el gran mago de la división de relojes del grupo LVMH.
Kering Group, otro de los holdings destacados del lujo, designó a Patrick Pruniaux como nuevo CEO de Ulysse Nardin. Patrik Hoffmann, un veterano de la casa del ancla, ya no está en uno de los barcos más respetados de la industria. Por otro lado, los grupos orientales del sector cobran fuerza y también juegan al ajedrez con cambios estratéticos. Citizen Watch compró Frédérique Constant, Alpina y el atelier De Monaco –las firmas de Peter y Aletta Stas, que aún ejercen como directores generales en transición-. Por su parte, Citychamp Group eligió a Jérôme Biard como director de la división de relojes, tomando la responsabilidad de Corum y Eterna. Con más de 25 años de experiencia en la industria relojera, ha pasado por Cartier y ejerció como director internacional de ventas de Girard-Perregaux.
Incluso las firmas independientes también se mueven. En junio de este año, Greubel Forsey reforzó su plantilla nombrando a su primer CEO, Fabrice Deschanel, que también dirige CompliTime SA. Deschanel trae consigo más de 25 años de experiencia habiendo ocupado papeles estratégicos importantes en marcas como Audemars Piguet. Por otro lado, el místico David Zanetta se ha retirado y De Bethune ya forma parte de un grupo inversor privado capitaneado por Giovanni Perin. Tras su breve periplo por Manufacture Royale, Pierre Jacques vuelve al frente de la excepcional firma junto al maestro relojero Denis Flageollet. Un destacado relevo generacional que busca nuevo rumbo dentro de un mercado en movimiento.
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