Greubel Forsey desafía los límites de la Alta Relojería artesanal, sus fundadores Greubel y Stephen Forsey han demostrado su creatividad al abrir nuevos horizontes en lo que respecta al rescate de la relojería tradicional.
Para la marca no sólo se trata de revivir antiguas técnicas y habilidades, el objetivo es tomar estas habilidades y ese saber hacer y llevarlos a niveles de excelencia y precisión. Su meta es revivir el arte ancestral de la artesanía en sus creaciones y al mismo tiempo, reforzarlo con una exigencia en la elaboración manual y una precisión que compite incluso con las máquinas modernas de producción. Hand Made 1 es la representación de este enfoque. Un guardatiempo que marca las horas, minutos y segundos con un tourbillon.
Greubel Forsey reunió a un equipo compuesto por los artesanos más experimentados en cada campo, principalmente de sus talleres, aunque también a algunos talentos externos. El reloj requirió 6,000 horas de trabajo. Demandó una completa reestructuración del proceso creativo, involucrando desde el principio a las personas que elaborarían y decorarían cada componente desde el principio.
Las dimensiones del reloj, 43.5 mm de diámetro y 13.5 mm de grosor, aumentaron aún más la dificultad de esta labor. Hand Made 1 fue hecho completamente de forma manual, desde el movimiento hasta la caja, la correa de cuero, la carátula y las agujas –las únicas excepciones son los cristales de zafiro, las juntas de la caja, los resortes, las piedras y el muelle real. Las carátula abierta destaca por sus marcadores esmaltados a mano combinados con unas manecillas de silueta elegante y acero azul intenso. La caja de oro blanco también está fabricada de manera manual gracias a un torno pantógrafo mecánico provisto de herramientas giratorias.
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