Fiona Krüger, el arte como identidad

En el marco del Salón Internacional Alta Relojería 2016 que se está llevando a cabo en el Hotel St. Regis del 18 al 20 de octubre, tuvimos oportunidad de conversar con la relojera independiente Fiona Krüger. Con licenciatura en Bellas Artes y una maestría en estudios superiores de diseño para la industria del lujo, Fiona se abre camino en un medio predominantemente masculino.

No es común encontrarse por los pasillos del salón a una relojera…
Es cierto, son varios los obstáculos que he tenido que sortear para que se me tomara enserio en esta industria. No solo el hecho de ser mujer, sino ser escocesa (ni siquiera suiza), menor de treinta años y finalmente haber diseñado un reloj con forma de cráneo.

Me llamaron mucho la atención tus piezas, en ellas se ve claramente la relación que hay entre arte y alta relojería que es un tema que me interesa…
Es curioso que lo menciones, la identidad de mi marca es justamente eso, un acercamiento artístico a la alta relojería. No solo debido a mis antecedentes dentro de las bellas artes, sino por la forma en que diseño un reloj. Pienso como artista, primero desarrollo un concepto fuerte, después investigo sobre el tema a fondo, y luego bosquejo el diseño que capta la idea completa.

¿Cómo llegaste aquí? ¿Cómo decidiste convertirte en diseñadora de alta relojería?
Todo empezó con un proyecto para Audemars Piguet. Cuando estaba estudiando la maestría la marca solicitó a mi clase que diseñáramos un reloj. Yo no sabía nada sobre el tema, así que hice algunas visitas de investigación. La que más impacto me causó fue la visita al museo de Patek Philippe y su colección histórica de relojes. Tenían piezas que eran tan perfectas como pequeñas esculturas. Me inspiró porque me mostró que un reloj podía tener la forma de cualquier cosa que yo me imaginara. No tenía que ser un círculo plano; ahí mi imaginación comenzó a correr.

De ahí el cráneo…
El cráneo para mi captura todas estas ideas sobre arte y creación que tengo. Es un signo reconocido en cualquier cultura. No solo es el símbolo último de la vida y la muerte, sino que engloba toda la experiencia humana.

En México tenemos una relación muy especial con este símbolo, la muerte, el cráneo…
De niña pasé tres años en México. Acababa de cumplir diez, es un recuerdo que tengo grabado muy fuerte, porque era tan diferente a todo lo que yo conocía. Los cráneos de azúcar y colores, las calaveras que bailan. Cuando desarrollé el concepto usé todo esa memoria personal y una idea que tenía arraigada sobre el tiempo y la mortalidad sobre ese 'memento mori'. El reloj tenía que ser mecánico y tenía que tener la forma de un cráneo.

¿Fue muy difícil traducir tu idea (bosquejo) del papel al objeto en sí?
Tengo álbumes completos llenos de recortes y bosquejos. Comencé haciendo dibujos en papel albanene que ponía sobre la ventana de casa de mis padres donde añadía y quitaba, ya sea patrones, o piezas. Finalmente modelé mi primer pieza en 3d, que se me hace bastante aburrido, pero traduce a la perfección mi pensamiento. Con todo ese material llegaba con los artesanos a preguntar si era posible producir un reloj con esas características. Finalmente pude hacer un prototipo que presenté como examen final dentro del proyecto en la maestría. Tardé más de dos años en encontrar a los proveedores y artesanos con los que ahora trabajo. Es un trabajo colaborativo, por ejemplo, estoy trabajando con Madame Gisèle Benoit, una de las mejores pintoras de miniaturas en la industria.

¿Ella pinta todos esos patrones que diseñas para tus relojes?
Sí, tienes razón hay muchos patrones dentro de mis diseños. Hay patrones que se repiten en muchas culturas. La artesanía, la geometría. La última vez que estuve en México fui a muchos mercados y compré todo tipo de textiles. He tratado de simplificar mis diseños, de hacerlos más, si no minimalistas, sí más mínimos, pero mi cerebro no funciona así. El realizar un patrón en la pieza es darle valor. Es tomarse el tiempo de decorar el reloj. Es de alguna manera mostrar cuánto te interesa el objeto.Lo que mencionabas al principio, ese link con el arte: sé que estoy haciendo un reloj y que es un objeto práctico que tiene que decir el tiempo, ser preciso… pero para mí, lo que me llama es el lado creativo. Es mi pasión.