El Rallye des Princesses se realizó su decimonovena edición. A bordo: 180 mujeres, pilotos y copilotos, quienes se asociaron con Richard Mille por cuarto año consecutivo. El evento arrancó en la columna de Vendôme, en París, con 90 autos clásicos que encendieron sus motores cuando los primeros rayos de sol se filtraron sobre la ciudad. Por primera vez en 19 ediciones, el rally comenzó en dirección sudoeste. El objetivo de la firma fue ofrecer una experiencia totalmente inmersiva. Para lograrlo suministró cuatro Porsche 356 de 1963, uno 911 de 1973 y un Mercedes Pagode 250sl de 1969. Seis equipos, por lo tanto, tuvieron que experimentar una concentración desde adentro.
El rally requirió llevar un libro de ruta, zona de regularidad, punto de control obligatorio, velocidades medias constantes: los equipos tenían que mantener el ritmo. El trabajo en pareja fue clave ya que el conductor necesita de las instrucciones del otro.
Precisión, perseverancia, determinación y trabajo en equipo son valores compartidos por los participantes en la carrera y Richard Mille, que presentó el nuevo RM 71-01 Automatic Tourbillon Talisman solo unos días antes de la carrera, el primer calibre automático de tourbillon completamente desarrollado por la maison. Un calibre que combina rendimiento, una calidad y belleza preciosas, al igual que los autos clásicos de carreras del fundador. Un reloj que impulsa a la marca a una nueva dimensión.
En las primeras horas del cuarto día, y para celebrar el cruce del rally en suelo español, el sol decidió emerger con todas sus galas. Para aquellos en los muchos descapotables que compiten este año, fue la oportunidad perfecta para desbloquear la capucha del auto y sacar un poco de crema solar. Escalando los pasos legendarios de Soulor y Aubisque a través del Pourtalet pass, este fue un día de intensa conducción. Las princesas llevaron al máximo las mecánicas de sus autos al girar a través de curvas y curvas y algunos escenarios impresionantes. Cuando llegaron a Formigal, la segunda etapa del rally, los 180 competidores estaban en forma olímpica, reforzados por un día espléndido. Y esto fue parte de la emoción: no hubo dos días iguales y cada uno creó recuerdos inolvidables.
Para Viviane Zaniroli, organizadora de la carrera: "esta decimonovena edición fue realmente emocionante y 90 equipos que participaron ciertamente no se decepcionaron. La cantidad y calidad de los participantes de este año fue impresionante y confirma la creciente popularidad del Rallye des Princesses Richard Mille, con el 50% de los participantes de este año participando por primera vez".
El escenario ya está listo para la vigésima carrera, una edición de aniversario que promete ser emocionante para los fundadores de las carreras femeninas de regularidad, la familia Zaniroli, con el apoyo de Richard Mille.
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