Hace veinte años (1985), Chronoswiss produjo el primer catálogo con relojes de pulsera y relojes de bolsillo producidos en Suiza. Gerd-R. Lang fundó la fábrica de relojes Chronoswiss en Munich con etiqueta suiza en el nombre de la marca. Ahora está en Lucerna. Oliver Ebstein adquirió la compañía y mantiene el adn de la marca en plena forma.
— El momento más feliz y el más difícil durante estos cuatro años dirigiendo la empresa.
Probablemente el reto de hacerme cargo de la compañía muy al principio, que fue realmente emocionante. El más desafiante fue la reubicación de la marca a Lucerna, donde trasladamos las oficinas, talleres, etc., de diferentes lugares, todo bajo el mismo techo. Y también las tareas de logística y las demandas que un movimiento tal realmente implica.
—¿Cómo es la relación con Gerd-Rüdiger Lang? ¿Está apoyando a la compañía como consultor?
Estamos muy contentos y agradecidos con él. Gerd-Rüdiger Lang es un amigo de la marca y también se ha convertido en nuestra familia.
—Otras marcas alemanas mantienen el logotipo "swiss germany". ¿Ayudó el "swiss made" para desarrollar y seguir creciendo?
El Swissness siempre ha estado allí, incluso en el nombre Chronoswiss, como una parte importante de nuestra marca. Los componentes han sido siempre suizos, la compañía también tuvo una sucursal en Suiza antes de que lo adquiriéramos. Era lógico trasladar la sede a Lucerna.
— ¿Cuál es el reloj más vendido de la marca?
Sin duda, es el modelo Regulator, que también ha sido el gran avance para Chronoswiss y está estrechamente conectado con la historia de la marca y su éxito. Recientemente, hemos desarrollado el reloj icónico en una nueva versión en 3-D, el Flying Regulator, que fue lanzado en Baselworld 2016.
—¿Es Asia, particularmente China, el principal mercado para Chronoswiss como la mayoría de las marcas? ¿A qué mercados les está prestando atención ahora?
Para Chronoswiss, Asia no es la máxima prioridad, pero uno de los muchos mercados importantes. Nunca ha sido el único foco de la marca. Nos centramos en los mercados tradicionales de los países de habla alemana, como Alemania, Austria, Suiza. Además, el mercado estadounidense es interesante.
— Ahora no es el mejor año para la industria relojera, y parece que el mercado aprecia el valor de la creación misma: calibre, funciones, diseño... No sólo el marketing.
Para nosotros, no es un gran problema. Chronoswiss nunca ha sido una de las marcas que se enfocan en un embajador-imagen en gran cantidad. Nosotros preferimos ceñirnos a nuestro credo de que el contenido es más importante que el "envase" –marketing o imagen-. Y esto es lo que seguimos pensando.
— ¿En qué áreas piensa que Chronoswiss tiene tareas por hacer? Oportunidades para reforzar la compañía.
Un punto importante fue la colección, fue necesario ordenar los modelos como parte del proceso de re-estructuración de hacerse cargo. Había habido demasiadas referencias, más de 120, lo que no es manejable para una marca de nuestro tamaño.
— Los siguientes pasos o proyecto a corto plazo en la empresa.
Estamos firmemente centrados en el desarrollo ulterior de la familia de la colección Regulator. Próximas actividades de marketing incluyen el patrocinio del evento de autos clásicos "Kitzbühel Alpenrallye" (patrocinador principal y socio), otras exposiciones como JCK, Las Vegas, SalonQP, Londres, etc.
— ¿Cuál es su reloj favorito?
Flying Regulator en oro rojo con su hermosa esfera guilloché en negro galvánico.
—¿Desea comentarnos algo más?
¡Todo lo mejor para sus lectores! Como nos gusta decir: "Regula tu tiempo"; es decir, que deberíamos dedicarnos a algo completamente, como admirar la hermosa esfera de un reloj Regulator, y así convertirnos en los dueños de nuestro propio tiempo otra vez. Saludos desde Lucerna, Suiza.
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