Nuevo diseño arquitectónico de la planta de alta relojería. Una renovación con materiales nobles como el mármol y la madera. Un espacio con nueva redistribución de las marcas que ofrece mayor amplitud y comodidad para el cliente. Además de nueva decoración más elegante, se han renovado las vitrinas de relojería y se han redistribuido la ubicación de las firmas.
Rolex, Patek Philippe, Audemars Piguet y Cartier ocupan la parte más destacada con corners más espaciosos en la sala que antes contaba con la barra de la cafetería. Y la otra parte interior cuenta con una clasificación de las marcas más visible y específica, separadas una por una.
Peyrelongue Chronos abrió esta sucursal por primera vez en 1994. Un proyecto iniciado por Hervé Peyrelongue, el padre de Luis, que actualmente está al frente de la empresa. Hervé llegó de Francia en los años 60 y empezó a colaborar con la joyería La Perla, que pertenecía a la familia Diener, entonces situada en la glamurosa Zona Rosa. En 1969 adquiró La Perla para bautizarla con su propio nombre en Amberes 5. Ya entonces representaba firmas como Rolex, Cartier y Baume & Mercier. Y comenzó a desarrollar sus propios diseños en joyería.
Posteriormente, sería el mismo Luis quien abrió una nueva sucursal en el número 14 de esta calle, sumando marcas como Patek Philippe, Audemars Piguet, Breguet y Hublot, entre otras. Peyrelongue Chronos está próximo a cumplir 50 años. Innovación, servicio, confianza y buen gusto. Larga vida al joyero en Masaryk y esquina Goldsmith.
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